Hola, conductores y conductoras! Aunque la mayoría de accidentes se producen por distracciones al volante o exceso de velocidad, la seguridad en la carretera es un tema cada vez más serio en nuestro país, y hay algunas enfermedades que podrían complicar un poco tu relación con el volante. Y no solo eso, pueden llegar a acarrear multas de hasta 6.000 euros. Este importe bajará a 200 euros para los que circulen y hayan obtenido el permiso de conducir o renovación antes de la aparición de la enfermedad.
Estar en un buen estado de salud, tanto físico como psicológico, resulta esencial para conducir. Vamos a echarle un vistazo a qué enfermedades podrían limitar tu capacidad de conducción sin problemas físicos o psíquicos.
Enfermedades Neurológicas:
Arrancamos con las enfermedades del coco. Cosas como la epilepsia sin control, la esclerosis múltiple en su versión más intensa, trastornos musculares fuertes o pacientes con disnea permanente en reposo o de esfuerzo leve deben ponerle un alto en la carretera. Si tienes alguno de estos problemas, mejor hablar con tu médico.
Problemas Cardiovasculares:
El corazón también tiene su papel en esto. Enfermedades cardíacas en modo avanzado, arritmias peligrosas o si tu corazón ha tenido algún incidente reciente, mejor dejar el coche aparcado por un tiempo. Las personas que han sufrido un infarto agudo de miocardio o sean portadoras de prótesis valvulares deben esperar tres meses para volver a conducir, y los pacientes que sean portadores de un marcapasos o desfibrilador tienen que esperar un mes para conducir. La renovación del permiso de conducir con estas enfermedades tendrá una vigencia de tres años.
Tómate en serio las recomendaciones médicas.
Trastornos Psiquiátricos:
La mente también juega sus cartas. Trastornos fuertes, como la esquizofrenia descontrolada, problemas de humor serios o ansiedades fuertes, trastorno del sueño, trastorno obsesivo compulsivo, TDH, depresión…, pueden convertirte en un conductor con mucho riesgo. Si te ves en esta película, es vital buscar ayuda profesional y pensar dos veces antes de agarrar las llaves.
Consumo de Sustancias:
Ah, y por supuesto, nada de sustancias mientras conduces, esto ya lo sabemos todos. Ya sea alcohol, drogas ilegales o medicamentos que te pongan en modo zombie, está terminantemente prohibido. Las multas por este show son serias, así que ni lo pienses.
Enfermedades Digestivas:
En este caso, si se trata de un trasplante renal, los afectados deberán esperar seis meses tras su intervención quirúrgica para readquirir el carne de conducir.
Enfermedades Crónicas y Degenerativas:
Para rematar, algunas enfermedades de largo plazo, como la diabetes sin control, problemas respiratorios avanzados, esclerosis múltiple, distrofia muscular, osteoporosis, parkinson, alzheimer…, pueden requerir una revisión más minuciosa para ver si te dejan al volante. Mantén esas condiciones bajo control y visita al médico de vez en cuando para que todo siga en marcha.
Los pacientes oncológicos con cáncer que afecte a las capacidades sensitivas, cognitivas o motoras que incidan en la conducción, con un informe favorable de su médico, podrán renovar el carné por un periodo de un año. Si no hay evidencia de enfermedad actual y no esta recibiendo tratamiento activo, el periodo será como máximo de cinco años.
Cuando las enfermedades afectan de forma estable, como por ejemplo la pérdida de un miembro, en general el déficit no varía, ya que se pueden compensar con prótesis y/o adaptación del vehículo.
Conclusión:
Recuerda, la seguridad es tarea de todos, ¡y eso incluye al volante! Si te toca lidiar con alguna de estas situaciones, infórmate bien sobre las reglas y habla con los expertos en salud. Ojito si estas de baja laboral por alguna de estas enfermedades, recuerda que NO PODRÍAS / DEBERÍAS CONDUCIR. Ten en cuenta que entre el 5% y el 10% de los accidentes de tráfico se relacionan con el consumo de medicamentos.
Al final del día, la meta es que las carreteras estén tranquilas y seguras para todos. ¡Conduce con cabeza!