«Un sueño hecho realidad» es lo que han dicho los cinco protagonistas de esta gran aventura, que han podido cumplir, en más de tres meses cruzando dos continentes y recorrer 20.000 kilómetros, para recibir la bienvenida de la mano de Friedrich Mattiszik (un alto cargo de la compañía) y visitar la planta de Volkswagen Vehículos Comerciales en Hannover, donde se está fabricando el último modelo de la serie T.
La expedición partió hace cuatro meses desde Malasia, su tierra natal, en dos modelos del año 67 y uno del 78 para atravesar Malasia, Tailandia, Laos, China, Rusia, y llegar a Europa y Hannover. Un largo viaje que vuelve a poner de manifiesto el “carácter indestructible del Bulli”.
Y al parecer esto no termina aquí, nuestros protagonistas continuarán su aventura por países como Francia, Belgica, y la región de Escandinavia, en una nueva misión que pasa por visitar a cientos de niños en varios orfanatos como parte de diversos eventos benéficos, terminando su aventura tras más de 50.000 kilómetros de nuevo en Malasia.
Desde Cerrato les damos un fuerte aplauso y mucho ánimo para terminar esta gran aventura.